Sábado, 2 de la mañana,

- ¿Dónde vamos?

-vamos ahí, que la entrada es gratis.

No amiguete, no es gratis, te obligan a consumir, y si un agua vale 4 euros, quizás, solo quizás, te están cobrando la entrada por otro lado. Uno no es especialista en la materia, pero aquí huele a engaño, a promotores que son unos putas, a duros a 4 pesetas. Señor dueño de la discoteca, quizá si su local no diese grima, iríamos aunque se tuviera que pagar entrada, pero si me haces consumir, mal lo llevas, me bebo lo justico, y me voy a mi casa; lo malo es cuando lo justo son 10 cubatas y otros tantos chupitos, pero eso ya es otra historia.